China dio la bienvenida el jueves al inicio del Año del Caballo con celebraciones moderadas, mientras la población obedecía la petición del Gobierno de encender menos fuegos artificiales, que se cree que traen buena suerte, debido a la preocupación por la contaminación del aire.
El Año Nuevo chino, que comienza el viernes, suele estar marcado por despliegues sonoros de fuegos artificiales y un sinfín de petardos, que según se cree traen buena suerte y ahuyentan a los malos espíritus. Los fuegos artificiales ennegrecen el cielo con humo durante horas.
Con una densa capa de aire contaminado cubriendo los cielos de parte del norte, centro y este de China – incluyendo Pekín y la capital comercial, Shanghái -, algunas personas decidieron que era preferible un despliegue más modesto.
Si bien Pekín reverberaba con fuegos artificiales y petardos, medios estatales informaron que las ventas habían caído y algunos residentes dijeron que no comprarían tantos.
«Esto no es bueno para el medio ambiente, no es bueno para el aire», dijo un vecino llamado Lao Song.
El año pasado gasté alrededor de 300 yuanes (unos 36 euros) en fuegos artificiales, pero este año sólo gasté alrededor de 100 yuanes», dijo Lao.
Zhang Debi y su esposa, Fang Lina, dijeron que en su puesto de ventas de fuegos artificiales en la frondosa zona de Shanghái que fue una concesión francesa sólo habían vendido la mitad de los fuegos artificiales del año pasado.
«La gente seguirá encendiendo algunos fuegos artificiales porque la atmósfera de las fiestas no sería buena sin ellos», dijo Fang. «Pero si se encendían demasiados tampoco estaría bien».
En línea con el llamamiento a la frugalidad del presidente Xi Jinping en medio de una campaña contra la persistente corrupción, las ventas de productos de lujo que suelen obsequiarse para Año Nuevo también han caído.
«Ya nadie se atreve a recibir este tipo de regalos lujosos», dijo Dou Qinlian, un vendedor de hongo de oruga, una hierba medicinal rara y costosa, desde su negocio en la capital tibetana de Lhasa, según la agencia de noticias Xinhua.
El Año Nuevo chino se caracteriza por la migración más grande de la Tierra, ya que centenares de millones de trabajadores viajan en tren, autobús, avión y barco para pasar las fiestas con sus familias. Para muchos chinos, es el único festivo que tienen en el año.
[Fuente: tnv-2.com]