Negados a morir. Caribes de Anzoátegui evitó la sepultura y remontaron una ventaja de tres carreras en el decimo inning, para dejar en el terreno a los Navegantes del Magallanes, 5 rayitas por 3, y así conseguir su primera victoria, en el quinto juego de la final.
Fue un duelo de pequeños detalles. La defensa y el fino pitcheo comandaban. Mientras el abridor turco, Dustin Richardson, dominaba con su slider, su rival, Daryl Thompson, obligaba a los contrarios a fallar.
El sometimiento del bullpen de ambos conjuntos obligó al extrainning. Refuerzos de la seguridad del “Chico” Carrasquel y la Guardia Nacional fueron desplegados a lo largo del terreno. Se esperaba una celebración.
En el decimo capítulo, Robinson Chirinos provocó que sacaran el champaña de las cavas, al conectar jonrón de tres carreras, frente a Hassan Pena con un out.
Silencio sepulcral por las tribunas de la derecha, luego que Jean Toledo terminara con el inning.
La torcida electrica tenía la fiesta montada. Solo tres outs lo separaban del título y no había mejor hombre para colgar el cero que Jean Machí. Pero, José Castillo castigó a la nave por partida doble, al disparar un infield hit que golpeó la mano de lanzar del cerrador.
El coraje y el pundonor de Machí por seguir fueron castigados con hit por la derecha de Cory Aldridge. Posteriormente, el derecho otorgó cuatro malas a Oscar Salazar y Héctor Giménez puso el juego por una rayita, con doble por la izquierda.
“Estamos contra las cuerdas, pero ya queda de nosotros ser como los buenos joseadores y tirar golpes para salir de ahí. Me sentía comprometido y en deuda con esta institución que me dio la oportunidad de ser el primer refuerzo”, dijo el inicialista, quien fue sustituido después del batazo por el corredor emergente Carlos Durán.
Fue en ese momento cuando Carlos García le quitó la pelota a Machí para dársela a Orangel Arenas. El campocorto Eduardo Escobar se paró en el home con la misión de empatar o ganar. Es decir, evitar el sepelio.
Tras abanicar el primer envío, el aragüeño la montó a mitad de gradas, por la izquierda. “Cuando nos hicieron las tres carreras en el decimo, estábamos un poco triste. Pero, salimos bastante concentrados y, gracias a Dios, pudimos aprovechar el descontrol de Machí. Como dijo Pedrique (Alfredo, el mánager), vamos juego por juego a buscar las victorias. Agarramos un nuevo aire y a partir del martes verán la tribu que ya estamos acostumbrados, guerreando”, indicó.
De esta forma, Caribes esquivó la barrida y este lunes descansará. Este martes, el “Chico” Carrasquel reventará con un enfrentamiento que promete alta tensión, pues Carlos Zambrano regresará a la loma, en un estadio donde pocos lo quieren ver triunfar.
[Fuente: Liderendeportes.com]