Un padre chino fue sorprendido en su intento de pasar de contrabando el cuerpo de su hijo de dos años de edad, lo llevaba en una bolsa de viaje en un autobús.
Yang Cheng, de 35 años y su esposa recogieron los restos de Li del morgue del Hospital de Hefei, en la provincia de Anhui antes de echarlo con cuidado en una gran bolsa de viaje. Luego fueron a la estación de autobuses donde trataron de subir a un vehículo que viajaba a su ciudad natal de Quqiu.
Sin embargo, el plan fue frustado cuando el personal puso la bolsa a través de un escáner de seguridad y descubrieron los restos del niño dentro.
La policía fue llamado y el señor Yang fue interrogado. Él les dijo que había recurrido a esa medida desesperada después de que se dieron cuenta de que no eran capaces de pagar un coche fúnebre.
El hombre fue puesto en libertad sin cargos y contrató un taxi privado para completar el viaje de dos horas a su casa. Según planetacurioso.com
El dijo: “No somos ricos y las empresas fúnebres querían cobrarnos una fortuna“.
Un portavoz de la policía dijo que esta prohibido el transporte de órganos en el transporte público.