Recomiendan a las mujeres que hayan tenido su desarrollo y se encuentren en etapa sexual activa, hacer una evaluación ginecológica anual en el que se incluya un ecograma transvaginal
El cáncer de ovario es una de las patologías ginecológicas más graves, ocupa la séptima posición entre las neoplasias malignas más comunes en la población femenina y provoca más muertes que cualquier otra patología oncológica del aparato reproductor. Así lo reflejan estudios realizados por la Fundación Internacional de Investigación Mundial del Cáncer.
Para concientizar sobre esta enfermedad, cada 8 de mayo se conmemora el Día Mundial del Cáncer de Ovario, una iniciativa promovida por organizaciones no gubernamentales que involucra a 78 asociaciones e institutos relacionados con la prevención y el apoyo al paciente con cáncer, en más de 25 países.
Luis Chirinos, cirujano oncólogo de la Clínica de Prevención del Cáncer de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV), explicó que la formación de tumores cancerosos en los ovarios se presenta mayormente entre los 40 y 50 años de edad, aunque todas las mujeres están en riesgo de desarrollar estas neoplasias a lo largo de su vida.
Chirinos señaló que el cáncer de ovario tiene el potencial de afectar las trompas de Falopio, el útero y la cavidad abdominal. “Cuando es diagnosticado en etapas tempranas es curable. El problema es que sus síntomas son muy inespecíficos. En caso que se haga un diagnóstico tardío de la enfermedad, el pronóstico es un poco sombrío, ya que puede ser muy agresiva, con una alta mortalidad”, agregó el especialista.
Dependiendo del lugar de origen de las células se identifican tres tipos de cáncer de ovario: El más común es el epitelial, (cobertura externa del ovario) y que engloba el 70% al 80% de los casos; se encuentra también el de células germinales, (productoras del óvulo) que puede verse en pacientes menores a 40 años; los menos comunes son los tumores estromales, formados por células del tejido estructural que sostienen al ovario y producen las hormonas femeninas estrógeno y progesterona.
De acuerdo con el registro de mortalidad de Venezuela, publicado en el Anuario Epidemiológico de 2012, (el más reciente emitido por el Ministerio del Poder Popular para la Salud) el cáncer de ovario fue la sexta causa de muerte entre las enfermedades oncológicas, con un total de 481 decesos. El 70% de las muertes estuvo en el rango de 45 a 74 años de edad. Se presentaron 10 fallecimientos en el rango de edad 15-24.
Sin síntomas
La enfermedad se caracteriza por la ausencia de síntomas tempranos. En fases avanzadas se presentan manifestaciones vagas que pueden ser confundidas con otros problemas, entre ellos los gastrointestinales. Puede haber dolor localizado en la parte baja del abdomen, sensación de llenura y distensión (hinchazón) abdominal.
“En vista que no se tiene un método de pesquisa suficientemente efectivo para aplicarlo de forma temprana, es muy importante que todas las mujeres que hayan tenido su desarrollo y se encuentren en etapa sexual activa, se practiquen una evaluación ginecológica anual, que se incluya un ecograma transvaginal”, aconsejó el galeno.
Detección y tratamiento
El ecograma pélvico transvaginal permite ver el útero y los ovarios con los anexos. “Con este primer estudio nosotros podríamos evidenciar la presencia de un tumor sólido, porque hay muchas mujeres con tumores quísticos de ovario que no tienen ningún potencial de malignidad. Cuando se tiene la sospecha clínica se solicitan pruebas más específicas, como la tomografía abdominopélvica con contraste endovenoso, marcadores tumorales, entre otros estudios”, especificó Chirinos.
El especialista refirió que el tratamiento generalmente implica cirugía. “Se hace una histerectomía, (extirpación de ovarios con sus anexos), toma de líquido peritoneal, y muestras de biopsia en la cavidad abdominal. En los casos de carcinoma avanzado, las pacientes son sometidas a quimioterapia neoadyuvante, una quimioterapia con el fin de disminuir la carga tumoral, antes de operar”, concluyó.
Fuente: [Nota de Prensa]