El traslado de órganos dentro de coolers llenos de hielo nunca me pareció una imagen muy atractiva, pero al menos no era necesario ver el “producto” congelado. Ahora, una compañía llamada TransMedics ideó una revolucionaria alternativa para los trasplantes de corazón que a ratos parece extraída de una película de ciencia ficción (o incluso de una de terror). Un poco menos placentero a la vista, pero aparentemente más efectivo a la hora de salvar vidas.
En el Organ Care System (OCS), el órgano no va inactivo ni invisible, sino al interior de una caja plástica transparente y conectado a un dispositivo electromecánico que le bombea sangre fresca y calentita. Así, se mantendría “vivo” por bastante más de las seis horas que dura un ejemplar on the rocks para llegar a su nuevo portador sin verse irreparablemente dañado.
El sistema funciona perfecto y actualmente la UCLA se encuentra en la fase 2 de estudios clínicos para asegurarse de que el resultado es tan bueno (y ojalá mejor) que el método tradicional del cooler. Una vez que obtenga el visto bueno de la FDA, probablemente comenzaremos a ver esta suerte de coche de paseo con un adorable corazón latiente paseando por la ciudad en busca de su nuevo portador.
El video con su funcionamiento (que puede resultar algo perturbador para los más sensibles):
[Fuente]