Calles abarrotadas y ambiente festivo. Berlín celebra una fiesta en la que caben todos: los más jóvenes -«Tenía 7 u ocho años cuando cayó el Muro, lo crucé con los ojos muy abiertos, fue increíble», dice una joven-, los mayores -«me siento como aquel día de hace 25 años»- y los que todavía no habían nacido.
Civiles y políticos unidos en la celebración de la libertad, a la que Merkel ha dedicado flores, velas y elogios: «La caída del muro prueba que los sueños pueden hacerse realidad». Y convertir la emblemática Puerta de Brandemburgo en un lugar mágico con las notas de Peter Gabriel cantando a los ‘Heroes’, y ritmos más raperos para bailar.
Pasadas las siete de la tarde, la caída de otro muro, éste de luz, formado por 8.000 globos de helio, cada uno con un mensaje. Durante 25 minutos los han soltado para que iluminen el cielo de Berlín, una ciudad convertida en símbolo de la unidad.
Fuente [Telecinco.es]