«En ese tiempo pensé que era una locura. ¿Cómo se llamaba ese tío que mató a su mujer y la lanzó al mar por la borda? Peterson. Recuerdo haber pensado que él recibía mejor trato que yo en los medios. Al menos tenían que decir supuesto asesino», contó a la edición norteamericana de la revista GQ.
«Desafortunadamente había algo como en esas peleas que ves en YouTube, donde uno se cae y las personas que están cerca le patean. Así me sentía en ese tiempo. Yo era la persona a la que se tenía que detestar», añadió.
El intérprete -quien actualmente está felizmente casado con Jennifer Garner- fue tratado con rabia por parecer una persona con hambre de fama debido a la cobertura que se hacía de su relación con Jennifer. De hecho, reconoce que todavía no entiende por qué se le odió tanto.
«Había tal cantidad de veneno… Debí tocar algún pequeño punto en la conciencia. No creo que mereciera ningún comentario negativo por nada. Sabía lo horrible que estaba siendo. Y era lo último que quería y podía ver cómo me estaba dañando. Pero seguía habiendo esa idea de ´este chico lo que quiere es esto, es un chupa cámara´», recordó.
Affleck, que ha sido nombrado Cineasta del Año en los premios Hombre del Año de GQ cree que el incidente es el responsable de su determinación por ser tomado en serio en la industria.