El artículo de hoy pretende ser el cierre a los dos anteriores: “Zapatero a su zapato” y “De alto desempeño II”.
En el primero hablamos sobre cómo en los equipos de trabajo cada quien debe concentrarse en lo que sabe y tiene experiencia y, en el segundo, sobre cómo convertir a un grupo de trabajo en un equipo de alto desempeño.
En este último, el carpintero nos dejó una tarea: Destacar el papel del líder, hoy la cumpliremos.
A ustedes, que les gustan las historias, aquí les tengo una que ilustra el rol del líder en el ámbito en que mencionamos en este artículo.
Es una historia basada en hechos reales, conocida como “La rueda y la luz”, que dice así: “La Dinastía Qin acababa de terminar y Liu Bang, el nuevo emperador, había podido unificar por primera vez a la gran China.
Para celebrar este acontecimiento, Liu Bang ofreció una gran fiesta donde se encontraban sus tres jefes de gobierno: Xiao- He, Han Xin y Chang Yang. Asimismo estaba Chen Cen, su maestro y consejero, con tres de sus discípulos, quienes confundidos, le plantean una inquietud a su admirado maestro.
En la mesa central, le dicen, están sentados Xiao-He, su conocimiento de logística es insuperable; Han Xin, quien es el mejor estratega guerrero de toda China, y Chang Yang, el mejor formando alianzas, sabe cómo ganar favores políticos y cómo acorralar a los jefes de Estado para que se rindan sin presentar batalla.
Si Liu Bang no sabe todo eso, ¿cómo es posible que él sea el emperador?
El maestro les pidió a sus discípulos que se imaginaran la rueda de un carruaje: ¿Qué determina la fuerza de la rueda para soportar el peso del carruaje y que pueda moverse? Los discípulos respondieron: ¿Será la resistencia de los rayos?
El maestro replicó: Además de los rayos, la rueda también tiene ciertos espacios entre ellos. Unos rayos fuertes pero mal colocados, hacen que la rueda en su conjunto sea débil. El potencial de la rueda depende de la armonía entre ellos.
La esencia de la fabricación de la rueda radica en la habilidad del artesano para concebir y crear el espacio que sostiene y balancea los rayos de la rueda. Ahora, ¿cómo asegura el artesano la armonía entre los rayos?
Piensen en la luz del sol, el sol nutre y vitaliza a los árboles, lo hace ofreciéndoles su luz pero al final ¿en qué dirección crecen? Así sucede con el artesano, que en este caso es Liu Bang, después de colocar a sus especialistas en puestos donde pueden desarrollar su potencial plenamente, asegura la armonía entre ellos, dándoles todo el crédito por sus logros distintivos.
Al final, como los árboles crecen agradecidos hacia el sol, los tres estrategas crecen hacia Liu Bang con devoción”.
Amigos, no hay seguidores sin líder y no hay liderazgo sin capacidad. En el mundo militar hay una máxima que reza:
“Las unidades son el reflejo de sus comandantes”, y la verdad es que aplica en cualquier tipo de organización. El líder reconoce lo que no sabe y entre otras cosas gerencia el tiempo y reconoce y administra las competencias, talentos, valores y emociones de sus seguidores, si no es así, no es líder, es simplemente jefe.
Es así como suena.
J.J. Fermín A. / @jjferminjr