La tecnología ha llegado para hacer la vida de las personas más fácil, sin embargo, esto no significa que ya no tengamos que utilizar nuestro instinto. En el caso específico de los sistemas de navegación vía satélite, la gente, en múltiples ocasiones, ha decidido seguir ciegamente sus indicaciones, sin ponerse a pensar que estos pueden llegar a tener fallas o que debido a su deterioro ya no funcionan En países como Gran Bretaña y España ya se han registrado muertes por accidentes causados tras errores en el funcionamiento del dispositivo. En Inglaterra, hay más de 300 mil siniestros ocurridos por fallas en el navegador; además, cabe destacar que en Europa más de la mitad de los vehículos cuentan con esta herramienta.
Un jubilado británico de 76 años de edad y su esposa, pasaron la noche en el hospital con heridas leves después de estrellarse contra la pared de una iglesia en Alemania, debido a que estaban siguiendo las instrucciones de su sistema de navegación satelital.
«Ellos estaban confundidos y no se dio cuenta de que el sistema de navegación era defectuoso», dijo un portavoz de la policía. Los daños totales fueron unos 25 mil euros, pues la construcción se vio afectada, así como los cimientos de la misma.
Lan Bansie, de 33 años, y Warrington Steve, de 31 años, dos ladrones de casas, fueron detenidos gracias al recibo de pago de la furgoneta que utilizaban para sus asaltos.
La camioneta que usaban del trabajo registró, con el GPS, todos los movimientos que realizaron en tres meses, por lo que los hombres no tuvieron de otra más que declararse culpables. Recibieron siete años de prisión.
El conductor de un Audi A4 al seguir ciegamente las indicaciones de su GPS terminó en las vías de un tren, lo cual paralizó el camino de la locomotora por lo menos en unos 20 minutos.
Tres estudiantes japoneses que se encontraban de vacaciones en Australia, decidieron tomar su auto y conocer la isla North Stradbroke, por lo que trazaron su ruta con el GPS. Todo iba bien, sólo que al sistema de navegación se le olvidó que tenían que cruzar nueve kilómetros de agua y barro entre la isla y el continente.
Al ingresar al camino lodoso, se atascaron y en cuanto la marea subió el coche terminó navegando por el océano. De hecho, los pasajeros de los transbordadores que pasan se asombraron al ver el coche.
La dueña de un Mercedes SL500, quien se dirigía a un bautizo en Leicestershire, Reino Unido, fue otra víctima del sistema de navegación satelital, que la llevó por caminos que sólo pueden ser recorridos por vehículos 4×4.
Aunque la pista está señalizada como «No apta para vehículos de motor», la conductora continuó y se encontró en un vado en el pueblo de Sheepy Magna, pero no le importó y siguió las indicaciones de su GPS, por lo que se dispuso a cruzar el paso que estaba hinchado después de días de lluvia intensa.
En su intento, el auto deportivo fue arrestado por la corriente 600 metros río abajo, y la mujer fue rescatada por unos lugareños, y el coche permaneció ahí por una semana.
De acuerdo a las indicaciones de su GPS, tres mujeres dirigían su camioneta Mercedes-Benz al hotel donde se hospedaban en Bellevue; sin embargo, terminaron en las aguas del lago del Parque Natural de Mercer Slough.
Según el informe de la policía, pasaba de la media noche y el camino estaba muy oscuro, pero las tres mujeres confiaron en la ruta que les indicó el navegador por satélite, por lo que continuaron hasta que se estrellaron con el estero. Las jóvenes, que se encontraban en la ciudad debido a unas conferencias, resultaron ilesas pero la camioneta terminó en el fondo del lago.
Robert Ziegler, de 37 años, siguió obedientemente las indicaciones de su GPS, sin embargo, terminó varado en un sendero montañoso en el que no podía continuar ni dar vuelta para regresar por donde llegó; por lo que tuvo que ser rescatado, junto con su camioneta, por un helicóptero.
El conductor comentó a la policía que se encontraba perdido y que tenía la esperanza de que su navegador por satélite lo regresara a la carretera principal, pero esto no fue así, por lo que utilizó su celular para pedir ayuda.
En la ciudad de Northbridge, Massachusetts, una señora de 46 años terminó, junto con su coche, en una trampa de arena de un campo de golf. De acuerdo con los reportes de la policía, la mujer de nombre Patricia A. Maione, argumentó que su GPS le indicó dar vuelta a la izquierda y terminó en un campo de maíz, ella continuó conduciendo para salir de la huerta, pero su viaje se vio interrumpido por la trampa de arena del Whitinsville Golf Club.
Además, la señora Maione conducía en estado de ebriedad, pues había consumido un litro y medio de vodka y llevaba en su auto una botella más. Fue arrestada y acusada de conducir con una licencia suspendida, en estado etílico, por conducción imprudente y por llevar un envase abierto de alcohol en el coche. Ella sólo dijo: «A mí ni siquiera me gusta el golf».
En Madrid, España, Celestino Sánchez recorrió más de 20 kilómetros en sentido contrario por la carretera de la Coruña (A-6), tras malinterpretar una instrucción de su navegador. Su vehículo terminó accidentado tras sufrir una salida de la carretera al esquivar a otro conductor que circulaba por ella. El hombre de 38 años salvó su vida, y argumentaba que sólo le hizo caso a su guía electrónico.
Un repartidor de pizza que iba en su automóvil para hacer una entrega, hizo caso a las indicaciones de su GPS, por lo que dio un giro equivocado, que lo llevó a las vías del ferrocarril donde se atascó y tuvo que huir porque un tren se acercaba a gran velocidad.
El coche terminó deshecho, pero el joven de 23 años pudo salvar su vida y las pizzas.
¿Quién tiene la culpa, el sistema de navegación o los conductores?
¿Hasta qué punto se debe confiar en la herramienta satelital?
¿Has tenido problemas con tu GPS?