Comer exclusivamente una fruta no es nada sano y Ashton Kutcher, que encarna a Steve Jobs en una nueva película sobre los primeros años de la compañía, lo comprobó durante la preparación de su papel. Al intentar seguir la misma dieta que Jobs acabó en el hospital.
El fundador de Apple acostumbraba a hacer dietas extremas durante su juventud, con periodos «frutívoros» en los que sólo ingería frutas, frutos secos y semillas o exclusivamente dedicados a un único alimento, como manzanas o melocotones.
Para meterse en en el papel y adquirir la misma perspectiva de Jobs, Kutcher trató de alimentarse unos días del mismo modo antes de empezar a filmar la película pero según cuenta al diario USA Today, acabó en el hospital.
Me doblaba de dolor y el análisis de mi actividad pancreática dio unos resultados completamente absurdos. Es terrorífico si se piensa en todo lo que pasó después.
En su juventud a Jobs le afectó profundamente la lectura del libro Dieta Para un Pequeño Planeta de Frances Moore. En su biografía Steve confiesa a Walter Isaacson que fue a partir de su lectura cuando decidió dejar de comer carne.
Pero el libro, cuenta Isaacson, «también reforzó su tendencia a hacer dietas extremas, incluidas purgas, ayunos o limitar la ingesta a dos tipos de alimento, como manzanas y zanahorias, durante semanas».