Un total de once ballenas piloto de aleta corta han sido localizadas muertas este domingo en el Parque Nacional Everglades (Florida), presuntamente pertenecientes al grupo de 51 ejemplares que quedaron varadas la semana anterior en la zona.
La Guardia Costera estadounidense ha elevado así a 22 el número de ballenas muertas desde entonces, al tiempo que ha indicado que otras 29 permanecen desaparecidas tras ser vistas con vida la última vez el viernes.
«En base a nuestro conocimiento de anteriores situaciones de varado, la perspectiva de encontrar al resto de ballenas con vida es escasa», ha indicado, tras manifestar que algunas ballenas podrían haber muerto y sus cadáveres haberse hundido.
Los científicos han realizado pruebas en las primeras once ballenas muertas para intentar detectar posibles enfermedades o patógenos que ayuden a desvelar el por qué del suceso, si bien los resultados no estarán disponibles hasta dentro de unas semanas.
[Fuente: 20minutos.es]