Durante la sesión ordinaria del pasado martes, la Asamblea Nacional aprobó un acuerdo para recuperar la piedra de Cueca, ubicada en Santa Cruz de Mapauri, en el parque Nacional Canaima, hecho que llamó la atención del diputado Américo De Grazia, miembro de la comisión permanente de Energía, Minas y Petróleo, debido a que hasta la fecha el gobierno no se ha pronunciado respecto al maltrato que han sufrido los pueblos pemones e indígenas, donde por centenares de años de ha originado el mineral.
Cueca, significa piedra roja, que a lo largo de la historia se ha conservado como un tema místico y mitológico dentro de los poblados ígneos, los mismos que “han sido víctimas de las arbitrariedades institucionalizada, donde se les han violado sus derechos a explotar el oro, las minas y los diamantes que ancestralmente y como lo reseña la historia han trabajando no sólo la tierra, sino los minerales y piedras preciosas, por ello aspiramos que de manera unánime se apruebe un acuerdo a favor y protección de los pemones e indígenas”, señaló el parlamentario.
Asimismo, De Grazia manifestó que debido a los atropellos que han sufrido los poblados indígenas en numerosas ocasiones, han tomado la acción de trancar el paso en la Troncal 10, con el fin de exigir respeto y derecho a ejercer lo que por años han trabajado, obteniendo un vacío como respuesta, “los pemones han sido perseguidos por el Ejercito Nacional, les han quemado sus ranchos, animales, comida, entre otros; y lamentablemente los expulsan de sus tierras para otorgárselas por medio de convenios a empresas trasnacionales argentinas, chinas, canadienses y rusas”.
Agregó que el gobierno no se ocupa del problema grueso del país como es el caso de trabajadores como los 140 despedidos de Minerven, quienes acudieron al edificio administrativo de la Asamblea Nacional para solicitar que diputados intervengan y les colaboren para buscar una solución al problema que presentan.
Por otro lado, se encuentran los 14 mil accionistas de Sidor que fueron expropiados y después de tres años no se les ha ofrecido una respuesta, pero si se le otorgó y no sólo respuestas a una trasnacional argentina que funciona en Bolívar.
Américo de Grazia aprovechó la oportunidad para recordarle al gobierno que 20 trabajadores de Ferrominera tienen 39 días de protesta, donde ocho de ellos se encuentran encadenados en los portones de la empresa, esperando que el gobierno les solucione los salarios que no perciben desde hace más de un año, al igual que fueron sacados del seguro y se les fue arrebatado el beneficio escolar a sus hijos.
Por último, el legislador por la Alternativa Democrática recordó que la intensión de hacerle recordatorios al gobierno no es un tema político, son las funciones que debe cumplir y que al parecer han quedado a un lado para el sector oficialista, debido a que todo lo están tomando como bandera para hacer campaña, pero “el pueblo venezolano está cansado de vivir de promesas, espera y sueña con un cambio que nos llevará al Progreso el próximo 7 de octubre”, dijo Américo De Grazia.
[Fuente: Bloque de prensa]