Taylor Sauer era una joven de 18 años que conducía a 180 kilómetros por hora cuando sufrió un fatal accidente que le llegó a costar la vida.
Y es que para la chica, estar al volante por cuatro horas le parecía aburrido y no pensó en las consecuencias de agarrar su celular para escribir unas cuantas cosas, lo que a la larga fueron sus últimas palabras:
»Conducir y ‘facebukear’ no es seguro, jajajajaja», publicó Taylor Sauer en Facebook; sin embargo, ella no frenó cuando se empotró contra un camión cisterna y perdió la vida de una manera poco creíble.