Las mismas posturas, el mismo día y ¡casi a la misma hora!, es lógico que la monotonía y el aburrimiento se hayan instalado en vuestras relaciones sexuales convirtiéndose casi en un acto mecánico. Te damos ideas sencillas, prácticas y del todo efectivas para salir de la rutina y volver a disfrutar plenamente de vuestra vida sexual.
Mantener viva la pasión es una de las claves para que una pareja funcione. Por supuesto el cariño, la amistad, la comprensión… no pueden faltar, pero despertar el deseo sexual entre vosotros es indispensable para mantener una relación plena.
No siempre es fácil. El trabajo, el estrés y el cansancio, la casa, las cuentas familiares, los niños o simplemente el día a día pueden hacer que la temida rutina llegue también a vuestro dormitorio y que vuestros momentos íntimos se vuelvan demasiado conocidos. ¿Cómo evitarlo? Prueba a sorprenderle con un poquito de imaginación y dejando a un lado inhibiciones y convencionalismos.
Los sábados, después de la película, en vuestra cama y con el pijama de invierno puesto… la situación puede llegar a ser muy poco romántica y menos excitante. ¿Qué tal si pones en práctica alguna de estas ideas?
1. Le espera una noche muy especial y para ello le avisas por teléfono, e-mail o sms con un mensaje subidito de tono que provoque inesperadas expectativas y absoluta falta de concentración en su trabajo. La tecnología está de tu parte, si es necesario envíale varios mensajes misteriosos y vé descubriéndole poco a poco lo que se avecina. Llegará a casa inusualmente temprano.
2. Cita a ciegas. Sorpréndele con una escapada romántica a un destino que él no conozca. También puede valer una noche en un hotel de vuestra ciudad donde os espere un delicioso baño de espuma y una mesa repleta de manjares afrodisiacos. Eso sólo será el principio.
3. Directamente al postre. Se trata de romper con la rutina así que nada de cenar y después ir al dormitorio. Recíbele en casa con un modelo de lo más sexy y una vez que te haya visto, véndale los ojos y explícale los beneficios de tomar fruta antes de las comidas, ¿qué tal unas fresas con chocolate? Que tú le ayudes a comerlas resultará de lo más sensual.
4. Un poco de fantasía. Cambiar el lugar o el entorno en el que mantenéis normalmente relaciones sexuales es sencillo y da excelentes resultados. Descubrir las posibilidades de otras estancias de la casa será divertido. También, una mullida alfombra, unos estratégicos y cómodos cojines, un espejo donde os veáis reflejados o un dormitorio con velas aromáticas y un improvisado dosel en vuestra cama podrán haceros revivir el cuento de "Las mil y una noches".
5. Tarde de compras. Seguramente no le guste nada el plan propuesto pero cuando descubra que lo que vais a visitar es una sex shop, su cara cambiará. Juegos “de mesa” muy particulares, aceites para sensuales masajes, ropa interior comestible, juguetes eróticos… luego habrá que probarlos.
6. Sin prisas. La relación amorosa no puede ser un acto mecánico y aburrido. Los preliminares son muy importantes a la hora de despertar la libido. Tomaros vuestro tiempo. Besos y caricias, especialmente en las zonas erógenas y pausados masajes de pies a cabeza harán que descubráis nuevamente el cuerpo de vuestra pareja y que disfrutéis de relaciones plenas. Es buen momento también para hablar de lo que más os gusta u os apetece con total confianza y para probar otras posturas que a ambos os resulten placenteras. Los límites los ponéis vosotros.
7. Un poco de sentido del humor. Siempre viene bien y no está reñido con una noche cargada de erotismo. Un particular streptease, un baile a la luz de las velas pero sin ropa, el juego de las preguntas y quien pierda se quita una prenda, una cena a la que hay que asistir disfrazados… se trata de disfrutar y de no permitir que la monotonía se instale en vuestra relación.