El presidente francés, François Hollande, admitió este domingo que la crisis alcanza de lleno a su país, que no crecerá en 2013 más que un 0,8 % y que ello le obligará a aplicar recortes masivos de gastos, de al menos 33.000 millones de euros.
En una esperada intervención en televisión apenas cuatro meses después de llegar al cargo, el presidente socialista anunció que los franceses tendrá que aceptar sacrificios, que se traducirán sobre todo en recortes de todos los gastos, salvo en educación, seguridad y justicia, más aportación de los hogares y de las empresas.
Hollande se fijó este domingo un plazo de dos años para lograr la "recuperación de Francia" de las consecuencias de la crisis económica que atraviesa el país. Las medidas anunciadas son, en palabras del propio Hollande, "el esfuerzo fiscal más grande de los últimos 30 años".
Ha revisado a la baja la previsión de crecimiento de la economía francesa para 2013 de un 1,2% a un 0,8%El jefe del Estado reconoció que en Francia hay "inquietud" por el aumento del paro, pero se defendió al decir que no es posible arreglar todo en los poco más de cuatro meses que lleva en el cargo.
"Tengo como misión la recuperación del país. Voy a establecer una agenda de recuperación, en dos años, en el empleo y las cuentas públicas", manifestó el presidente, criticado en las últimas semanas por la actitud de su Gobierno y la falta de precisión en las reformas.
Hollande ha revisado a la baja la previsión de crecimiento de la economía francesa para 2013 —de un 1,2% a un 0,8%—. "El crecimiento se ha estancado durante muchos meses y apenas estará por encima del 0% en 2012", declaró Hollande en la entrevista.
Recorte de 30.000 millones
El presidente confirmó que para alcanzar los objetivos, el Estado deberá hallar la manera de ahorrar 30.000 millones de euros: "Habrá que encontrarlos", declaró.
El presidente indicó que su intención es obtener ese montante en tres ámbitos: 10.000 millones a partir de recortes ministeriales— "excepto Educación, Seguridad y Justicia", puntualizó —. Hollande agregó que otros 10.000 millones de euros deberán proceder de un impuesto del 75% a las grandes fortunas y otro del 45% a hogares que ingresen más de 150.000 euros anuales. Los otros 10.000 millones restantes vendrán de aportaciones suplementarias de las grandes empresas del país.
"Lo hago por convicción y porque no quiero dejar que nuestros hijos carguen con la deuda de Francia", declaró el presidente, quien anticipó que su reforma más importante, la imposición de un impuesto excepcional del 75% a las grandes fortunas, podría permanecer en vigor durante dos años según se desarrolle la recuperación económica.
Impuesto a las grandes fortunas
El presidente francés agregó, en referencia a una de las medidas principales de la campaña electoral que le llevó a la jefatura del Estado, la imposición de las mayores rentas, las superiores al millón de euros, que se aplicará.
"La medida del 75% —de imposición máxima sobre las rentas superiores a esa cantidad— no está puesta en entredicho, los que han querido ir por ahí lo hacen por cuenta propia", dijo el presidente después de que en los últimos días circularan informaciones de prensa en las que se mencionaba una marcha atrás del Gobierno socialista en esta medida.
Aseguró además que no habrá excepciones a la aplicación de esa medida y que afectará en torno a 2.000-3.000 personas. "Todos los salarios superiores a un millón de euros, a partir de un millón de euros, tendrán un gravamen del 75%".
Hollande consideró como una "provocación" el anuncio del presidente del grupo de empresas del lujo LVMH y mayor fortuna de Francia, Bernard Arnault, de que solicitará la nacionalidad belga, aunque mantendrá la francesa y la residencia fiscal en territorio galo. "Se esperaba", dijo Hollande respecto a ese anuncio sorpresa.
Reforma del mercado de trabajo
Hollande adelantó que será necesaria una "reforma del mercado de trabajo, para que sea más flexible y al mismo tiempo más protector", en alusión a la situación de desempleo que registra el país, que ya tiene más de tres millones de parados, por encima del 10% de la población activa. Respecto a esto ha anunciado creará 100.000 empleos de futuro a finales de este año.
"No puedo hacer en cuatro meses lo que mi predecesor no hizo en cinco años", declaró además en alusión al conservador Nicolas Sarkozy, al que Hollande venció en los comicios celebrados en abril y mayo pasados.