Para nadie es un secreto que las celebridades pasan bastante tiempo en el gimnasio y tratando de comer bien para mantener sus cuerpos perfectos. Pero algunos de ellos han llevado la obsesión por la delgadez demasiado lejos, cayendo en el territorio de los desórdenes alimentarios.
Jessica Alba ha sido una de las celebridades que ha sido elogiada por tener una gran figura, pero la sexy actriz una vez estuvo obsesionada con lucir fabulosa siendo extremadamente flaca, por lo que comenzó a jugar con fuego y batalló con la anorexia durante años.
“Muchas mujeres sufren de desórdenes alimentarios, yo también los sufrí. Me obsesioné con eso. Cuando pasé de tener el cuerpo de una chica, a la de una mujer adulta con grasa natural en ciertos lugares, enloquecí. Te hace sentir extraña, como si no estuvieras lista para ese cuerpo”, admitió la estrella a la revista Glamour en el 2005.
Lucy Hale, la estrella de “Pretty Little Liars”, es una de las más recientes celebridades que ha confesado su desorden. La actriz de 21 años reveló a Cosmopolitan que se mataba de hambre debido a problemas con su imagen corporal.
“Nunca he hablado de esto, pero pasaba días sin comer. O quizá me comía una fruta y luego me iba al gimnasio por tres horas. Sabía que tenía un problema, fue un proceso gradual pero me cambié a mí misma”, admitió.
Lady Gaga también reveló recientemente que batalló con la bulimia cuando era más joven.
“Solía vomitar todo el tiempo cuando estaba en la secundaria, así que no soy tan segura. Quería ser una bailarina delgada pero era una niña voluptuosa a quien le daban albóndigas en la cena todos los días”, reveló a principios de este año durante una conferencia.
También confesó que lo que la salvó de ser una víctima permanente de este problema fue su deseo de salvar su voz.
“Le hice daño a mi voz, por eso tuve que parar. El ácido en las cuerdas vocales es muy malo”, dijo.
Para Mary-Kate Olsen y Nicole Richie fue imposible evitar las especulaciones sobre su desorden alimentario cuando ambas estrellas fueron vistas luciendo esqueléticas. Afortunadamente, ellas no lucharon solas y decidieron buscar ayuda profesional para recuperar su salud.