Google acordó pagar USD$22,5 millones a la Federal Trade Commission, la mayor multa emitida a la fecha por la entidad, por instalar cookies de rastreo en Safari saltándose las configuraciones de privacidad del navegador.
La comisión agregó que Google debe “desactivar todas las cookies de rastreo” relacionadas con este caso, algo que la compañía de Mountain View ya hizo cuando se conoció este incidente, que según la empresa ocurrió por accidente.
Un código plantaba una cookie en el equipo del usuario incluso si en la configuración se había impedido el ingreso de cookies, “aun cuando Google había dicho previamente a estos usuarios que estarían automáticamente excluidos de este rastreo, debido a las configuraciones por defecto de los navegadores Safari usados en Macs, iPhones e iPads”, indicó la FTC.
El código de Google aprovechaba una falla en las configuraciones de seguridad del navegador, ingresando una cookie temporal correspondiente a DoubleClick, que a su vez abría la puerta a todas las cookies, incluyendo a las de rastreo publicitario.