Dinero llama dinero, dice un refrán; que en este caso más bien podríamos llevar a “polémica llama a polémica”: Julian Assange, el polémico periodista australiano fundador de la Web de revelaciones WikiLeaks, ha contratado al también polémico jurista español Baltasar Garzón, para que lo asesore en el proceso de solicitud de asilo político en Ecuador.
La información fue suministrada por Ricardo Patiño, el Ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, país al que Assange solicita asilo, refugiado en su Embajada en Londres. Allí precisamente, en la capital británica, Assange y Garzón se habrían reunido, tras lo cual el australiano decidió contratar la asesoría de Garzón.
“El señor Assange ha pedido los servicios del abogado Baltasar Garzón para tratar su caso (…) por supuesto, tiene todo el derecho de contratar y de buscar el apoyo jurídico que necesite y que pueda necesitar para el proceso de solicitud de asilo político que ha presentado al Ecuador”, ha dicho Patiño a la prensa.
Durante su carrera como jurista, Garzón ha llevado temas polémicos, y saltó a la fama internacional tras promover una orden de arresto contra el ex dictador chileno Augusto Pinochet por la muerte y tortura de ciudadanos españoles durante su mandato, además de haber ordenado una investigación de las cuentas en el extranjero del segundo banco más grande de España, BBVA, por supuestos delitos de lavado de dinero.
Polémico, precisamente, es Assange y el caso que enfrenta: Recordemos que está solicitado por Suecia para interrogarlo sobre supuestos crímenes sexuales, pero que ha expresado en diversas oportunidades que todo es una maniobra para extraditarlo a Estados Unidos donde su vida correría peligro, ya que allí se le acusa de traición tras la filtración a la Web de cientos de cables de diplomáticos norteamericanos.
Así las cosas, la polémica que ha marcado la vida de Garzón y Assange de nuevo les une, y no por casualidad: El jurista español tiene buenas relaciones con el Gobierno del ecuatoriano Rafael Correa, al punto el español forma parte de un panel internacional que fue creado para supervisar la actual reforma judicial en Ecuador.