La imagen de un galán con una aventura donde se refleja la labor de un servidor público de primera como lo es el bombero, cautiva a los seguidores de las historias de amor del horario vespertino de Venevisión en su nueva y exitosa producción dramática.
Eduardo Orozco es, según las últimas mediciones, el actor que mantiene más televisores prendidos en el país a partir de las 2 de la tarde donde el público sigue las incidencias de la historia de amor que, el apuesto Orozco, protagoniza junto a su compañera de aventuras y desventuras Sabrina Seara en la novela “Válgame Dios” escrita por Mónica Montañés.
La vida de este galán esta llena de contrastes y la pasa entre cámaras de TV, las tablas y otra de sus grandes pasiones como lo es el deporte.
“Actualmente entreno con mucha intensidad para correr los 42 kilómetros de la Maratón de Amsterdam”, indicó Orozco, quien junto a su bolso de hacer deporte por supuesto no falta el guión con el parlamento de la historia que a diario se puede seguir por Venevisión a partir de las 2 de la tarde.
El evento está pautado para el mes de Octubre y reunirá a los más importantes y destacados maratonistas del planeta y por supuesto que allí destacará la atlética figura de este actor.
“Mi trabajo está enfocado a la cobertura de los 42 kilómetros en Amsterdam, y lo más seguro es que antes de ese compromiso me encuentre con un par de triatlones de dimensiones olímpicas, también los cumpliré”.
Eduardo está en una constante actualización, reinventándose nuevas experiencias utilizando para ello ese juego que le enfrenta su vida donde existe un manejo de técnicas actorales, y a partir de esto – acotó – es donde empieza lo bueno, la diversión que se da en las diferentes interpretaciones.
“El gusto lo encuentro al resolver un día largo, de mucha actividad que implica la realización de una novela, en el romanticismo y lo poético de cada plano artesanal en el cine o en la mágica adrenalina del teatro. Y si aparte tienes la suerte y el lujo de salir de ahí y poder disfrutar de un público, entonces es que me convenzo que conseguí la mejor profesión del mundo”.
Este primer actor venezolano confesó su total admiración y respeto por el británico Jude Law, “tuve la oportunidad de verlo en vivo en Broadway interpretando Hamlet, y al salir de la función la orden que me di fue trabajar y estudiar todo lo que pueda y lo que me ha motivado a redoblar el paso en mi carrera siempre con el aparato creativo a millón”.
[Fuente: ARTE Y ESPECTACULOS R&Z COMUNICACIONES]