Después de dejar el restaurante E.Baldi en Beverly Hills el pasado jueves, Lindsay Lohan, de 26 años, fue vista con una calva en la parte posterior de la cabeza.
A pesar de que se metió en su Porsche negro y se marchó, los paparazzi pudieron hacer algunas tomas. Sus extensiones de cabello eran claramente visibles y su pelo parece estar adelgazando, según publica thesop.org.
La actriz no tuvo cuidado en cubrir las partes donde ya no tiene cabello. La calva matará a su carrera más rápido que las drogas y el alcohol.
Algo más por lo deberá preocuparse.
[Fuente: www.generaccion.com]