En concreto serían 3.999.999.999.982,222 grados centígrados. Y te quejas del calor que está haciendo estos días. Se trata la mayor temperatura jamás producida por el hombre y se debe al choque atómico que ha tenido lugar en el RHIC, acrónimo en inglés del Colisionador Relativístico de Iones Pesados. El microondas de los dioses.
Una temperatura 250.000 veces más elevada que la del núcleo de nuestro Sol.
Se alcanzó cuando el núcleo de una partícula de oro chocó con otro del mismo material en el interior de ese Scalextric a la bestia. Circulando a gran velocidad y en sentido opuesto, el choque dejó un reguero de quarks y gluones y de paso el record Guinness de temperatura producida por el hombre.
El plasma subatómito resultante del choque permite a los científicos estudiar las condiciones que debieron darse en los primeros instantes de existencia de nuestro Universo, hace unos 14.000 millones de años. Lo mejor es que si esta temperatura te parece elevada no tienes más que esperar unas semanas al próximo experimento en el CERN y su famoso Gran Colisionador de Hadrones para ver cómo la superan. No podían hacerlo en invierno y aprovechar ese calorcito para la calefacción de toda Europa.
[Fuente: www.gizmodo.es]