Al momento de redactar estas líneas recién culminó la marcha del primero de mayo, y terminé de conversar con el buen amigo de Guanta Orlando Gómez sobre la necesidad imperiosa de hacer un exhorto público a los candidatos de la unidad, dentro de las primarias, para que cesen en su política de agresión mutua.
Sobre todo dos de los tres candidatos de la alternativa democrática en la circunscripción 4, que la integra los municipios Sotillo, Urbaneja y Guanta, han sobresalido por lo virulenta de sus campañas.
Ante esto, y escuchando las quejas de vecinos de Puerto La Cruz, Lechería y Guanta, me atrevo a realizar este llamado público al cese de acciones que perjudiquen al otro.
Todos somos demócratas y nuestro rival político lo encarna un oficialismo que desde la cúspide del poder usa y abusa de su estatus para perjudicar a millones de venezolanos que día a día tienen que padecer por los errores del Ejecutivo nacional.
Nuestro oponente, dentro de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), no es aquel que milita en otra organización disidente del régimen sino el Gobierno mismo con sus acciones, omisiones y desmanes.
Tenemos que ahorrar energías para enfrentar el oficialismo rojo en vez de mal gastarla con nuestros aliados dentro de la MUD.
A quienes andan deambulando por la senda de la confrontación, quienes han optado por la política del descrédito del compañero, les hago un llamamiento público para que mermen en sus acciones y reflexiones sobre el favor que directa o indirectamente le están realizando al régimen.
No es el momento de ataques fratricidas, sino del mayor entendimiento y concordia entre nosotros para poder vencer al sistema más empobrecedor y arrogante al cual hayamos enfrentado en nuestra historia.
Las primarias no deben entenderse como un medio para crear fricciones entre quienes adversamos al régimen, sino un medio democrático para definir quienes son los mejores candidatos de la Unidad Democrática.
Por eso, todos quienes han decidido participar en la consulta interna de la MUD tienen que sellar pública e internamente el compromiso de respetarse y de realizar la campaña más limpia de la cual se tenga memoria, porque la creación de heridas entre nosotros no traerá nada bueno entre nosotros.
Usted, apreciado lector, que dedica su tiempo a leer esta columna espera de los candidato de la unidad un comportamiento digno y respetuoso entre ellos a la medida que aspira una posición dura y enérgica ante un Gobierno destructor y hambreador.
Por estas razones les hago, respetuosamente, a todos los aspirantes de la Unidad una invitación de análisis de sus acciones y actuaciones, de sus frenéticas ansias de imposición y de victoria, para que recuerden que por encima de cada uno de nosotros está el país como eje y centro de nuestros esfuerzos sinceros.
La agresión mutua entre quienes deseamos un cambio en la dirección del país es simplemente una traición al pueblo, por este motivo como ciudadano, como demócrata, le suplico a aquellos comandos de campaña que están empleando instrumentos agresivos o contrarios a la ética que abandonen este camino y rectifiquen.
Venezuela y su futuro son más grandes e importantes que cualquier puesto de elección.
Recuerden al ex presidente López Contreras cuando dijo: “clama y cordura”.
José Dionisio Solórzano / @jdsolorzano