Una de las asociaciones más lucrativas de los últimos años en el mundillo de la electrónica de consumo y el audio portátil acaba de llegar a su fin. Tras generar millones de dólares en jugosos beneficios, soliviantar a los audiófonos y dar pie a la creación de incontables imitadores, Monster Cable y Beats Electronics han anunciado que romperán su asociación para fabricar auriculares, optando por no renovar su contrato a cinco años.
BusinessWeek informa que ambas fuentes han confirmado que la ruptura se produce por "desacuerdos en materia de ingresos" y "quién merecía el mayor reconocimiento por el éxito de la línea [de productos]".
Para intentar cubrir el tremendo hueco que dejará la marcha de Beats, Monster lanzará de aquí a final de año ocho nuevas gamas de auriculares, que ya pueden venderse como pan caliente si quieren evitar una escandalosa pérdida de beneficios; para que te hagas a la idea de la mina de oro sobre la que estaba sentada Monster, aproximadamente el 60% de sus ingresos procedían de la venta de los productos Beats by Dr. Dre.
Sea como sea, los nuevos auriculares de Monster deberán usar un diseño nuevo, dado que el actual es propio de Beats Electronics, que sin duda tratará de buscar un nuevo socio mientras sigue cobrando por sus acuerdos de licencia con compañías como HP, HTC e incluso Chrysler. De forma paralela, además de lanzar nuevos auriculares Monster tratará de reorientarse como una marca dirigida a (entre otros) clientes de corte ejecutivo, por lo que imaginamos que entraría en directa competencia con Bose.