El nuevo Rey de Arabia Saudita apoyaría una política de la OPEP de mantener la producción de petróleo sin cambios para proteger la cuota de mercado del grupo de los productores rivales, aún cuando los mercados energéticos enfrentan algunos de los cambios más grandes en décadas.
El Rey de Arabia Saudita Abdullah murió la madrugada del viernes y su hermano Salman se convirtió en el nuevo monarca, dijo la corte real del mayor exportador de petróleo del mundo en un comunicado oficial.
Salman nombró a su medio hermano Muqrin como heredero a la corona, una decisión para evitar el temor a una crisis de sucesión en momentos en que Arabia Saudita se enfrenta a una agitación sin precedentes en sus fronteras.
Se espera que el nuevo rey continúe en líneas generales las políticas de Abdullah, según los analistas.
«El rey Abdullah fue el arquitecto de la estrategia actual de mantener la producción alta y forzar la salida de los jugadores más pequeños en lugar de realizar un recorte», dijo John Kilduff, socio de Again Capital LLC en Nueva York.
Los futuros del crudo subieron inicialmente el viernes, pero luego se debilitaron y todavía operaban a unos niveles más de un 50% por debajo de sus picos más recientes en junio del 2014.
Kilduff dijo que Salman es conocido como un defensor de los intereses de Arabia Saudita y que el mercado podría esperar que mantenga una producción alta.
El analista de FGE Tushar Bansal dijo que «en general, a partir de ahora no se espera un cambio importante en las políticas saudíes», pero sostuvo que el mercado se centrará en si el ministro de Petróleo de Arabia Saudita podría ser reemplazado.
«Ali Al-Naimi, ha sido el ministro de petróleo desde 1995. Anteriormente se reportó que había expresado su deseo de dimitir, pero el rey Abdullah le pidió que permaneciera mientras él estuviera en el poder».
«Por lo tanto, la verdadera pregunta es, si hay un nuevo ministro de Petróleo pronto, ¿esto dará lugar a un cambio en la política energética saudí?», agregó.
Los futuros del crudo subieron inicialmente el viernes, pero luego se debilitaron y todavía operaban a unos niveles más de un 50% por debajo de sus picos más recientes en junio del 2014.
Última sucesión. Una continuación de las políticas existentes estaría en línea con lo que sucedió después de la última sucesión. En el 2005, cuando murió el rey Fahd, surgieron preocupaciones similares sobre el liderazgo de Arabia Saudita.
Tras el anuncio de la muerte del rey Fahd el 1 de agosto del 2005, el crudo Brent subió a un máximo histórico de casi US$61 por barril.
El príncipe heredero Abdullah, que en la práctica gobernaba desde que Fahd sufrió un derrame cerebral en 1995, asumió como nuevo monarca y los funcionarios buscaron calmar a los operadores al subrayar que no habría cambios en la política petrolera de mantener a los mercados bien abastecidos.
Fuente [Americaeconomia.com]