Según la publicación ‘Korea Times’, parece que la colaboración entre LG e Intel para presentar un smartphone Android sobre un chipset Moorestown en el pasado CES 2011 tendrá su secuela en el próximo certamen que tendrá lugar entre los próximos días 10 y 13 de enero.
En este caso, se espera que el dispositivo de LG incorpore en sus entrañas un procesador con capacidades ligeramente superiores, sonando la nueva generación de chips Medfield como principal candidato, dados sus buenos resultados en comparación con otros chipsets de la competencia tales como NVIDIA Tegra 2 o Qualcomm Snapdragon MSM8260.
Evidentemente la pregunta que nos viene a la cabeza es si el dispositivo llegará a comercializarse en algún momento, dado que su difunto hermano pereció en el mitad del proceso a pesar de los denodados intentos por parte de Intel de incorporarse al panorama de las plataformas móviles.