Esta planta herbácea, de sabor y olor picante, exótico y muy aromático, ha sido utilizado con fines medicinales y culinarios desde hace miles de años.
La hierba, de hasta 1m de altura se cultiva en tierras calientes. La parte del jengibre que es útil para dichos fines es la raíz (rizoma), un tubérculo de forma gruesa y abultada que puede sugerir graciosas formas a la imaginación; por fuera, estos rizomas, carnosos y gruesos, son de color cenizo, y entre blanco y amarillento por dentro.
La planta tiene hojas alargadas como las de maíz, las cuales, cuando apenas germinan envuelven con su vaina el tallo. De flores vistosas, están dispuestas en espigas cónicas y soportadas por escamas empizarradas. Su fruto es seco.
El jengibre se come y utiliza pelado y sin corcho. El consumo de esta raíz puede ser ya sea en forma desecada, pulverizada, fresca, confitada, en tabletas, en jarabes, etcétera. En la cocina es una especia muy útil, da un sazón especial a las sopas, ensaladas, purés, guisos, pescados, vegetales al vapor, bebidas, dulces, postres, etcétera. En la cocina oriental es un elemento muy utilizado. Su uso es bastante extenso y se recomienda ir probando la preparación del alimento para paladear el sabor que queremos conseguir.
Composición química del Jengibre: aceite esencial (0,5 a 3 %) que contiene derivados terpénicos; resma (5 a 8%); principios amargos cetónicos y fenólicos (zingerona, gingerol, shogaol) y otras sustancias.
Propiedades y usos terapéuticos:
• Muy buen aperitivo
• Excelente tónico estomacal: estimula jugos gástricos.
• Es antiinflamatorio: muy útil en casos de reumatismo, alivia el dolor asociado a la artritis reumática, osteoporosis, y pacientes con desordenes musculares.
• Alivia dolores musculares y reumáticos.
• Antimareo: en el siglo V se utilizaba para aderezar la comida de los marineros para evitar el “mal del mar” o mareo, así como el escorbuto. Las enzimas del jengibre catalizan muy rápido las proteínas digestivas presentes en el estómago, por lo que dejan poco tiempo para sentir náuseas. Si vas a viajar en avión o en carro, toma un poco de jengibre. Tiene muy buen efecto en niños.
• Es anti-úlcera: alivia los síntomas de inflamación, también protege la creación de úlceras digestivas. Se han identificado aproximadamente 6 componentes anti ulcera contenidos en el jengibre.
• Antioxidante: ayuda a rejuvenecer y a combatir los radicales libres causantes de la degradación de los tejidos. El jengibre contiene fuertes propiedades antioxidantes.
• Sistema circulatorio: es beneficioso para combatir enfermedades de las arterias coronarias, sin afectar los lípidos y la azúcar de la sangre.
• Ayuda a aliviar la gripe y la tos.
• Se utiliza para el tratamiento de la dispepsia, empacho o indigestión.
• Ayuda a combatir hinchamiento del abdomen por gases.
• Combate flatulencia y nauseas.
• Tiene propiedades afrodisíacas, excelente estimulante, provee ánimo, vitalidad y longevidad.
• Ayuda a combatir infecciones.
• Previene ataques del corazón.
• Previene cáncer de la piel.
• Ideal en las dietas para bajar de peso ya que ayuda a perder grasa extra.
• El brebaje o té de jengibre de la raíz fresca ha sido usado en china e India por siglos como un bajativo para ayudar a la digestión.
• No se recomienda la toma de jengibre en casos de fiebre, ya que tiende a elevar un poco la temperatura corporal, por lo que puede agravar las molestias. Las dosis recomendadas varían entre 250 a 1000 miligramos diarios, según la finalidad y condiciones de la persona.
[Fuente: comerycallar.blogspot.com]