Nintendo acaba de anunciar que las ventas de Wii U no han sido las esperadas y esto ha llevado a la compañía japonesa a registrar el tercer mes consecutivo de pérdidas.
La compañía ha rebajado también las expectativas de ventas de la consola Wii U para este año en un 70% a 2,8 millones de unidades, una cifra mucho más comedida que las expectativas iniciales. La llegada de las consolas de Microsoft y Sony al mercado a finales del pasado año tiene parte de culpa.
Wii U no termina de despegar
Satoru Iwata, presidente de Nintendo, se ha disculpado con los accionistas de la compañía en la reunión que han mantenido esta mañana en Osaka pero también ha comentado que no habrá movimientos en el equipo de dirección y gestión de Nintendo a corto plazo.
Queda lejos el éxito de la consola Wii, hablamos del año 2006 y todas las ventas que ello acarreó. Además de ello la compañía ha mantenido cerrado el parque de juegos que desarrolla, dejándolos de manera exclusiva para su plataforma.
Las tendencias de juego del mercado cambian y la gente también juega en tablets y móviles, lo que podría dar un empujón económico a la compañía.
La estrategia de Nintendo en el punto de mira
La compañía japonesa obtuvo un gran éxito con la consola Nintendo Wii pero parece que no han sido capaces de repetir la jugada con Wii U.
En el pasado, el mercado acusaba la falta de títulos de renombre para su consola y la mayoría de juegos de Wii eran juegos casuales en lugar de juegos más elaborados como la popular franquicia de RockStar, Grand Theft Auto y es algo que la compañía está intentando solucionar.
Iwata ha admitido que no ha cumplido los objetivos durante el periodo de ventas navideño:
“No hemos conseguido cumplir nuestro objetivo de ventas hardware durante finales de año, cuando los ingresos son los más altos”.
El resultado de ventas de Wii U es bastante peor de lo esperado, y si bien la compañía ha ajustado ligeramente a la baja previsiones de ventas de Nintendo 3DS, de 18 millones a 13,5 millones de unidades, parece que en el terreno de consola portátil aún mantiene tracción.
Previsiones: pérdidas operativas y netas
Nintendo espera que este año fiscal (finaliza el 31 de marzo) reporte unas pérdidas operativas de 35.000 millones de yenes comparadas con las previsiones iniciales de un beneficio de 100.000 millones de yenes. La nueva estimación también parece quedarse algo corta en el volumen de pérdidas frente a las previsiones de 18 analistas de Thomson Reuters I/B/E/S que apuntan a pérdidas de 54.700 millones de yenes.
La compañía también ha apuntado que se esperan unas pérdidas netas de 25.000 millones de yenes en este periodo cuando se esperaban unos beneficios de 55.000 millones de yenes. Ahora las previsiones de ingresos quedan reducidas en un 36%, hasta los 590.000 millones de yenes, lo que recortará el dividendo de los accionistas hasta 100 yenes desde los 260 yenes del año anterior.
El comportamiento en Bolsa de Nintendo no ha sido tan malo este último periodo, ya que si bien ha caído un 10% en el periodo de los últimos 2 años y medio, en 2013 las acciones han crecido un 55% resultado muy próximo a las estimaciones del 57% de Nikkei.
[Fuente: xataka.com]