La cuestión radica en muchas ocasiones en que desconocemos nuestro propio cuerpo, lo que puede ocasionar infecciones o molestias habituales cuya solución puede estar en cambiar sencillos hábitos cotidianos.
Frases como «Los tampones generan más infecciones», «No te sientes en la taza de un baño público» o «Lavarte la vagina con jabón es perjudicial» están ya muy escuchadas por las mujeres y al final terminan por generar confusión mezclando mito y realidad, y a plantearse preguntas acerca de qué es recomendable y qué no en la limpieza de nuestro sexo.
Un pH entre 4 y 5 es el ideal para cuidar esta zona y mantener la flora de la vagina en su estado natural. Los hábitos de vida modernos, el estrés, los cambios hormonales o una excesiva humedad pueden tener consecuencias infecciosas en la zona.
Un grupo de expertos ginecólogos ha elaborado una lista de recomendaciones para la higiene en la vagina, unos fáciles consejos para que no se corra el riesgo de molestias o dolores.
Es difícil coger una infección en baño público
Sobre los tampones, no se recomienda dormir con ellos, los médicos aconsejan que se cambien cada 4 horas para no dar cabida a la aparición de bacterias. En cuanto a las duchas íntimas los médicos tienen una postura radical, están prohibidas ya que altera el estado natural de los genitales.
Acerca de la moda de depilar la zona genital, el consejo de los ginecólogos es mantener cierto nivel de vello alrededor del clítoris y de la uretra, ya que el pelo es una protección natural para las bacterias. Advierten que si utilizas el láser para depilar esta zona, no debe ser de CO2.
Sobre el rumor popular de que orinar en los bares o sitios públicos puede causarte problemas, los especialistas afirman que es difícil contraer alguna infección por orinar en un baño muy concurrido, ya que sería necesario un contacto directo con la persona que pudiese tener una dolencia.
Los salvaslip, los médicos aclaran que su única función es proteger la ropa interior del flujo vaginal, pero que en ningún caso sirven como barrera protectora ante infecciones vaginales. Advierten que su uso cotidiano puede alterar el pH de la vagina ya que el material del que están hechos es sintético, con perfumes, puede generar alergias en sus usuarias, en este caso, la vulva y la vagina generan más flujo para protegerse, lo que aumenta las posibilidades de infección.
Ropa ajustada, se recomienda por parte de los expertos evitar el uso de pantalones muy ajustados ya que impiden la transpiración natural de los genitales y aumentan la posibilidad de padecer enfermedades.
La fricción durante las relaciones sexuales puede dar lugar a molestias en la vagina, tras el acto sexual la mujer debe orinar para eliminar residuos.
La limpieza cotidiana debe realizarse abriendo los labios con los dedos para permitir que el agua pase, pues es aquí donde se acumula grasa y conviene eliminarla.
Los ginecólogos aconsejan que la limpieza se haga con un jabón líquido ya que no altera la flora vaginal, sin embargo si se utilizan jabones en barra que tienen un pH alcalino pueden generar irritación. La limpieza ha de ser externa, y se debe realizar en todas las etapas de la mujer desde bebé hasta la tercera edad.
[Fuente: diariofemenino.com]