Los países en vías de desarrollo son especiales víctimas de los paraísos fiscales. El fraude tributario que permiten esas guaridas quita recursos al progreso de pueblos enteros. El fenómeno de la fuga de capitales no declarados se ceba sobre todo en América Latina. De los diez países en desarrollo con más fondos fuera de registro, cuatro son latinoamericanos.
Después de China, Rusia y Corea del Sur, Brasil es el cuarto país con más salida de capitales no declarados, con 519,5 millardos de dólares, lo que incluye tanto los que se fueron del territorio propio como lo que estos rindieron invertidos fuera entre 1970 y 2010, según el informe que el año pasado publicó Tax Justice Network, una red de expertos que luchan por mayor justicia tributaria en el mundo, informó lapatilla.com
México se encuentra sexto en la clasificación de países emergentes, por debajo de Kuwait e inmediatamente por delante de Venezuela y Argentina. De México se han fugado en 40 años unos 417,5 millardos; de Venezuela, 405,8 millardos y de Argentina, 399,1 millardos.
“México y Venezuela tienen altos niveles de activos externos no declarados, al igual que otros exportadores de petróleo, porque es un negocio con enormes volúmenes y en el que normalmente hay corrupción”, observa Jorge Gaggero, investigador de TJN en Buenos Aires.
De todas las regiones del mundo en desarrollo, solo Asia oriental, con 2,9 billones, supera a Latinoamérica, con 2 billones, según TJN.