El satélite Intelsat 27, fabricado por Boeing, se ha estrellado hoy en el Océano Pacífico al fracasar su misión de lanzamiento. Unos 50 segundos después del despegue del cohete Zenit-3SL, encargado de poner en órbita el satélite, la comunicación se perdió por completo. Sea Launch, la compañía que opera la plataforma marítima Odyssey desde donde se produjo el lanzamiento, confirmó esta mañana el accidente. En el vídeo de arriba (a partir del minuto 2:00), se puede ver el momento en el que el cohete parece cambiar de trayectoria y empieza a caer en picado. La rentransmisión fue interrumpida poco después.
El Intelsat 27, que pesaba más de 6 toneladas, se lanzaba para ofrecer señal de televisión a varias zonas de EE.UU., Europa y Latinoamérica. En el accidente no hubo ningún herido, solo las pérdidas del satélite y el cohete, que se estrellaron en las inmediaciones de la plataforma Odyssey.
El director de la organización rusa de ingeniería espacial “Energía”, Vitali Lopota, comentó a la agencia estatal de noticias RIA Novosti que el lanzamiento fracasó debido a una "desconexión de emergencia en uno de los motores. Ocurrió unos 50 segundos después del despegue. Ahora estamos investigando qué ha ocurrido".
El consorcio Sea Launch, controlado por el gobierno ruso, es el que gestiona la plataforma martíma de lanzamientos Odyssey. De las 34 misiones que se han llevado a cabo hasta ahora, solo 2 (excluida la de hoy) han fracasado. Debajo, fotos de la plataforma en el Pacífico y de uno de los cohetes Zenit-3SL, igual que el que se ha estrellado hoy.