Un día después de haber sido sancionado de por vida por la Unión Ciclista Internacional (UCI) y de desposeerle de sus siete Tours de Francia, el propio Lance Armstrong borró en su Twitter cualquier referencia a sus triunfos en la ronda gala.
Este acto parece indicar una aceptación de las sanciones por parte del exciclista estadounidense.
Ahora los casi 3,8 millones de seguidores de Armstrong pueden leer que sus intereses son "el crecimiento de mis cinco hijos, la lucha contra el cáncer, la natación, la bicicleta, correr y el golf siempre que puedo…".
El director de la prueba francesa, Christian Prudhomme, afirmó ayer en una breve comparecencia ante la prensa que para el Tour ese puesto ya está vacío, pero precisó que la decisión formal le corresponderá tomarla a la UCI.